La mayoría de nosotros no hemos sido entrenados ni educados para saber empatizar con los demás. Solo se reconoce el valor de la empatía desde hace pocas décadas, y sin embargo ahora somos conscientes de que es esencial para nuestras vidas.
Aprende cómo desarrollar empatía, una habilidad clave para mejorar tus relaciones interpersonales en la vida personal y profesional.
¿Qué es la empatía?
La empatía es una de las competencias de la Inteligencia Emocional. Se define como la capacidad de ser consciente, comprender y apreciar los sentimientos y pensamientos de los demás.
La empatía está relacionada con el manejo de las emociones, porque una correcta gestión emocional con uno mismo es condición necesaria para poder escuchar y estar abiertos a los demás. Nos ayuda también a comprender y gestionar las emociones en el contexto de la convivencia con los otros.
¿Por qué es tan importante?
Las personas que tienen poca empatía a menudo tienen dificultades para comprender lo que los demás sienten y piensan y para dar la debida consideración a esos sentimientos y pensamientos. Como resultado, estas personas a menudo se ven envueltas en malentendidos y relaciones tensas.
Si tienes empatía evitarás muchas veces herir los sentimientos de los demás, además podrás trabajar de manera efectiva en esfuerzos cooperativos. Por otra parte, la capacidad de sentir empatía es esencial para desarrollar la compasión.
Todo esto es clave para las relaciones interpersonales, tanto en el ámbito personal y familiar como en el contexto laboral o social. En cualquier circunstancia ayuda tener empatía, tanto a uno mismo como a los demás. Un mundo más empático es un mundo mejor.
¿Cómo desarrollar empatía?
La empatía es una habilidad que algunas personas tienen más que otras, pero se puede desarrollar o perder. Si lo que quieres es trabajarte personalmente para tener más, estas claves te ayudarán.
- Adquiere el hábito de expresar tu aprecio por los demás todos los días.
- Pregúntate: ‘¿Qué siente esta persona?’ Especialmente en situaciones difíciles.
- Sé fiel a tus promesas a los demás
- Toma consciencia del impacto que tienes en los demás, pide feedback, escucha sus impresiones
- Aprende a escuchar reflejando pensamientos y sentimientos a los demás.
- Haz preguntas amables: ¿Qué puedo hacer por ti? ¿Que necesitas?
- Conviértete en un observador de cómo las personas expresan sus sentimientos, incluido el lenguaje corporal y otras comunicaciones no verbales.
- Construye una cultura familiar y/o empresarial que sea emocionalmente segura y amigable.
- Intenta ver una situación difícil desde la perspectiva de otra persona.
- Desarrolla un interés sincero en otras personas preguntándote qué puedes aprender de ellas o en qué les puedes ser útil.
- Ábrete a compartir tus pasiones e intereses con los demás.
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